La bioseguridad en el vacuno de leche como base de una ganadería rentable y sostenible

La bioseguridad en el vacuno de leche como base de una ganadería rentable y sostenible

La bioseguridad es uno de los pilares en los que se basa la rentabilidad de una explotación lechera. Disponer de un buen plan de prevención, que potencie la salud y el bienestar del ganado y que garantice la calidad y trazabilidad del producto final, es imprescindible para mejorar la productividad de la granja. Pero ¿cómo definimos de una manera rápida la bioseguridad? En general, podemos decir que la bioseguridad es el conjunto de medidas de prevención que se toman en una explotación ganadera. De esta manera, la bioseguridad engloba diferentes aspectos como evitar o reducir el riesgo de entrada de enfermedades y sus vectores, evitar o disminuir la difusión de enfermedades en la granja e incrementar la resistencia de los animales a las enfermedades.

Por tanto, no se trata tanto de eliminar o de tratar animales enfermos, sino de evitar que enfermen.

Ambiente y bioseguridad

Entre todos los aspectos a tener en cuenta, el ambiente en el que se desenvuelve la vida productiva de los animales desempeña un importantísimo papel que, desde el punto de vista de las instalaciones, incluye:

• Los alojamientos. Tienen que proporcionar un lugar de descanso suficiente y adecuado (limpio, seco y confortable), y que no causen daño o temor.

• La calidad del aire. La temperatura, humedad y ventilación deben ser las adecuadas.

Si bien los propios animales son los principales responsables del transporte de los gérmenes dentro o fuera de la granja, las instalaciones, el manejo y el ambiente general de la explotación influyen de una manera muy importante en su difusión. Mejorando el ambiente en el que viven los animales, disminuimos su sensibilidad a la enfermedad y, en consecuencia, aumentamos su resistencia.

La bioseguridad en el vacuno de leche como base de una ganadería rentable y sostenible

¿Cómo puede influir la cubierta en la mejora de la bioseguridad?

Como se mencionaba anteriormente, el diseño de los alojamientos y la elección de los materiales de construcción pueden determinar en gran manera el éxito de un plan de bioseguridad. Así, el panel sándwich para cubierta Agrotherm+, es de fácil limpieza y desinfección, lo cual evita que la carga microbiana sea elevada y reduce la transmisión de enfermedades. Pero, además, garantiza un alojamiento confortable y seco al ser impermeable, transpirable y no producir “efecto tambor”, que tanto estresa a los animales, cuando llueve.

Al tratarse de un panel aislante, contribuye además a que la temperatura y humedad de las naves esté siempre dentro de unos valores adecuados. Todo ello, unido a las soluciones de ventilación pasiva en cubierta de Euronit, como caballetes y chimeneas, permite asegurar que la calidad del aire en los alojamientos sea siempre la idónea.

La bioseguridad en el vacuno de leche como base de una ganadería rentable y sostenible

¿Cómo mejorar la salud de la ubre en la sala de ordeño?

Las mastitis son sin duda la principal enfermedad a la que tiene que hacer frente el productor de leche. Su prevención también debe abordarse con un enfoque multidisciplinar. Y aquí es donde las instalaciones nos pueden ayudar a hacer a los animales más resistentes. Una sala de ordeño con una baja carga microbiana es uno de los pilares en los que basar el programa de bioseguridad. Una vez más, un correcto diseño de la misma y una adecuada elección de los materiales de construcción puede determinar el éxito del programa de bioseguridad. Así, el recubrimiento higiénico Glasliner, fabricado con resina de poliéster y reforzado con fibra de vidrio, es el recubrimiento ideal para muros interiores que requieren una alta exigencia sanitaria. Son fáciles de lavar y desinfectar, no se manchan, no absorben olores y resisten a la corrosión, con lo que ofrecen una máxima protección sanitaria con un mantenimiento mínimo. De esta manera, ayudamos a reducir la carga microbiana de la sala de ordeño, mejoramos la salud y el bienestar del ganado y, en definitiva, la rentabilidad y sostenibilidad de la explotación lechera.

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